Salud
Nutrición: se comprobó que personas depresivas podrían mejorar su estado de ánimo si comen mejor
Hallaron una explicación científica a la aparente obviedad de que los alimentos influyen en el estado de ánimo.
Sí. No es ninguna novedad. Pero no por ello vamos a dejar de hablar sobre el tema. La comida modifica nuestro estado de ánimo y en este último año y medio, encerrados por la pandemia, esto se volvió un asunto todavía más importante. Y es que en todo este tiempo hubo personas que batallaron con altos niveles de estrés, depresión y ansiedad, por lo que recurrieron más a cierto tipo de alimentos para sentirse reconfortados. El helado, las pizzas y las hamburguesas estuvieron a la orden del día. Sin embargo, hay que advertir que por más reconfortantes que se sientan en el paladar, son los que menos benefician a la nutrición y a la salud mental.
Algunos estudios sobre nutrición sugieren que los alimentos cargados de azúcar o con alto contenido de grasa a los que acudimos cuando estamos estresados o deprimidos, son reconfortantes pero son los que menos benefician a la salud mental. En cambio, sería mejor optar por alimentos integrales como frutas, vegetales, huevos, pescado, frutos secos, legumbres, entre otros, para obtener el efecto contrario. A esto, los especialistas le llaman psiquiatría nutricional, porque se estudia la relación entre la alimentación y el bienestar mental.
En afán de no caer en el sentido común, de que comer ciertos alimentos podría promover la salud cerebral y a la vez mejorar la salud del corazón, se hizo necesario últimamente ahondar en ciertas pistas interesantes sobre qué alimentos podrían afectar nuestros estados de ánimo. Investigaciones anexas indican que las personas que comen muchos alimentos ricos en nutrientes, al final reconocieron sentir menos depresión y mayores niveles de felicidad y bienestar mental.
COMEMOS MAL PORQUE ESTAMOS DEPRIMIDOS O NOS DEPRIMIMOS POR COMER MAL
Algo que le falta a las investigaciones mencionadas es determinar si además de mostrar correlaciones en sus resultados, pueden encontrar causales de la depresión. En otra palabras, ¿es posible decir que la depresión lleva a los individuos a comer poco saludable o por comer mal es que se sienten deprimidos? ¿Una dieta saludable puede alegrar a una persona o una persona feliz se motiva a elegir buenos alimentos? Desde 2017, algunos investigadores intentaron estudiar estos comportamientos. De hecho, ese año un ensayo arrojó luz sobre la temática. Fueron reclutadas un grupo de 67 personas que padecían depresión clínica y las dividieron en dos segmentos. El primer grupo era aconsejado por un nutricionista que les enseñó a seguir una dieta. El otro grupo se reunía con alguien que les brindaba solamente apoyo social, pero no consejos de alimentación.
Al cabo de un tiempo se pudo comprobar cambios notables en el grupo que seguía una dieta alimentaria correcta, ya que reemplazaron los dulces y la comida rápida por alimentos integrales. En este grupo mejoraron la puntuación promedio de depresión, al contrario del otro conjunto de sujetos que sí mostraron cambios pero no tan profundos como los que acompañaron el tratamiento con un régimen alimenticio. Como este tipo de investigaciones, se supo que se continuarán haciendo para seguir argumentando la teoría de que la comida influye en el estado de ánimo.