Salud
Mitos de la nutrición: los lácteos no generan aumento de peso
Tampoco incrementan el colesterol.
En el mundo de la nutrición, hay un sinfín de mitos que tienen que ver con el consumo de lácteos que en muchas ocasiones generan desinformación y un elevado desconocimiento del tema. «Para bajar de peso se debe dejar de consumir lácteos», «las personas con intolerancia a la lactosa deben evitarlos» o «se deben eliminar de la dieta si se tiene colesterol alto» son algunos de los mitos según la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN). A este mensaje se suman las Guías Alimentarias para la Población Argentina (GAPA) que recomiendan ingerir tres porciones de lácteos por día, preferentemente descremados, en todas las etapas de la vida. Cabe destacar que toda alimentación saludable cumple con las leyes de cantidad, calidad, armonía y adecuación, lo que significa que debe ser suficiente, completa, respetar una proporción equilibrada de nutrientes y adaptarse al individuo. Así lo explican los especialistas.
Respecto de las afirmaciones que son verdaderas, se sabe que los seres humanos son los únicos mamíferos que consumen leche después de la lactancia materna y, por ende, que consumimos leche de otra especie. El hombre, como ser racional, es la única especie que tiene completo dominio sobre su cadena alimentaria de nutrición, y elige la leche por los amplios beneficios que ofrece para la salud.
Cabe recordar que a través de los lácteos se obtiene el calcio necesario para formar huesos y dientes, se mantiene la presión arterial equilibrada, los músculos adquieren fuerza y salubridad y se mantiene un peso corporal saludable. También es verdadero que los deportistas pueden hidratarse con leche en remplazo de las bebidas isotónicas o el agua. La leche es una bebida única, que provee nutrientes como hidratos de carbono, proteínas, grasas, minerales y vitaminas, es decir, es un alimento completo.
MÁS MITOS
Otros mitos sobre los lácteos dicen que la leche orgánica o ecológica es mejor que la leche de vaca. La mayoría de los estudios que comparan alimentos orgánicos con tradicionales demuestran que no existen diferencias nutricionales y de seguridad alimentaria ente ellos. Tampoco demuestra que tengan mejor sabor que los convencionales. Otro de los mitos dice que si se tiene colesterol alto, es mejor dejar de consumir lácteos, también es falso. Varios estudios científicos demuestran que a medida que aumenta el consumo de lácteos, disminuye el riesgo de enfermedad cardiovascular y accidente cerebrovascular (ACV).
Tampoco es cierto que haya que dejar de consumir lácteos para bajar de peso, ya que no se ha encontrado evidencia que asocie esas variables. Incluso, estudios epidemiológicos muestran una asociación entre el consumo de algunos lácteos y la prevención de la ganancia de peso a largo plazo. Respecto de personas con intolerancia a la lactosa, hay que considerar que actualmente existen en el mercado productos lácteos reducidos en lactosa, como quesos, leches y yogur, por lo que también es falso que no pueden consumirlos.